lupa

Pulmón y VIH

Pulmones y VIH

¿Cuál es el problema? 

Entre las muchas infecciones pulmonares existentes, destacan la neumonía, la bronquitis o la tuberculosis. Las dos primeras normalmente se tratan con descanso, ingesta de líquidos y antibióticos. La tuberculosis también se trata hoy con los antibióticos adecuados. 

Entre las enfermedades pulmonares, a su vez, destacan:

Hipertensión arterial pulmonar: no es demasiado frecuente, afecta al sistema circulatorio y pone en riesgo al corazón. Es difícil de diagnosticar porque sus síntomas suelen asociarse a otras enfermedades cardíacas o incluso pulmonares.

Obstrucción pulmonar crónica: dificulta la respiración y es consecuencia de un daño pulmonar largo frecuentemente asociado al tabaco.

Cáncer de pulmón.

Asma: se debe a la inflamación de las vías respiratorias y también provoca dificultades para respirar. Afecta a personas de cualquier edad. Los alérgenos, las partículas irritativas como el humo de los cigarrillos o las infecciones pulmonares pueden producir asma.

Catarros, tos, mocos, flemas o dificultades respiratorias pueden ser síntomas de problemas pulmonares que conviene revisar.

¿Cómo afecta el VIH a los pulmones?

El VIH no provoca cáncer de pulmón, pero es importante caer en la cuenta de que sí puede afectar a la salud de tus pulmones. 

Si tu sistema inmune está debilitado por el VIH, es más probable que puedas contraer una infección de garganta o pulmonar. 

Algunos estudios indican que las personas que viven con VIH tienen más posibilidades de tener hipertensión arterial pulmonar.

Tu edad, tu estilo de vida y otros factores pueden afectar a tus pulmones, tanto si tienes VIH como si no. Sobre todo, el tabaco, que es la causa principal tanto del cáncer de pulmón como de la obstrucción pulmonar crónica.Las personas que viven con VIH fuman más por lo general. La prevalencia de obstrucción pulmonar crónica es también más alta en estas personas. 

Dado que las personas que viven con VIH tienen su sistema inmunológico debilitado, el riesgo de que sufran una infección pulmonar tipo tuberculosis es mayor. Además, algunos estudios indican que el VIH puede aumentar el riesgo de desarrollar hipertensión arterial pulmonar 

¿Cómo cuidar tus pulmones?

Conviene que te sometas a chequeos periódicos y que revises la salud de tus pulmones. Escúchalos, escucha cómo respiras. 

Hazte la prueba de la tuberculosis y cada cierto tiempo recurre a los rayos X para ver cómo están tus pulmones. Mide también periódicamente tu capacidad pulmonar. 

Y lleva una vida saludable. Deja de fumar o, al menos, reduce el consumo de cigarrillos. Dejar de fumar es vital. Busca ayuda si no puedes hacerlo solo. Comer bien y vivir físicamente activos es esencial para reducir el riesgo de infecciones pulmonares. 

Recuerda que una carga viral baja o indetectable y el correcto seguimiento del tratamiento antirretroviral pueden rebajar la gravedad de la infección o de la enfermedad pulmonar y reducir el riesgo de volver a contraerlas. 

Tu médico sabe mejor que nadie qué tipo de vida debes llevar y cuál es el tratamiento que mejor se ajusta a tu situación.

Referencias y Bibliografía

Cómo afecta a tu cuerpo

Todo sobre los efectos del VIH en el organismo y claves para poder llevar una vida larga y plena.

  • Salud mental
  • Corazón
  • Pulmón
  • Hígado
  • Riñón
  • Huesos
  • Diabetes
  • Cáncer
  • Menopausia

¿Crees que puedes tener VIH?

PREGUNTAS CON RESPUESTA

Actualidad

VIHpedia